Consejos para una vista sana

Descubre nuestros 10 consejos para mantener tus ojos sanos y evitar futuros problemas de visión. 
 

1. Una dieta sana

Una dieta equilibrada es importante para la salud de tus ojos. Algunos alimentos son especialmente importantes, como las verduras de hoja verde por la vitamina A, los cítricos (como las naranjas y las uvas) por la vitamina C y el pescado por los omega 3.

2. Actividad física

Mantenerse activo y hacer deporte te ayuda a mantenerte sano. Además, evitará que contraigas enfermedades como la diabetes, que pueden dañar tus ojos.  

3. Revisiones periódicas

Debes acudir al médico o al oftalmólogo (oftalmólogo) con regularidad para mantener tus ojos sanos. Si notas que no ves tan bien como antes, es muy importante que te lo revises.

4. Usa tus gafas

Si necesitas gafas o lentillas para ver bien, debes asegurarte de que las llevas exactamente como te ha dicho tu oftalmólogo. También debes cuidarlas, con la ayuda de un adulto si es necesario.

5. Buena higiene

Algunas enfermedades, como la conjuntivitis, están causadas por bacterias, por lo que debes tener buenos hábitos de higiene.
Si usas lentillas, debes lavarte las manos cuando te las pongas y te las quites para evitar ensuciarte los ojos.

6. Protección adecuada

Si juegas al hockey con tus amigos, vas a clases de química o nadas en la piscina, debes llevar la protección adecuada para que tus ojos no sufran daños.

7. Cuidado con el sol

Cuando estés al sol, debes llevar siempre unas buenas gafas de sol. Ten cuidado, algunas gafas de sol no protegen adecuadamente y pueden ser peligrosas. Asegúrate de que ofrecen una buena protección UV cuando las elijas y nunca mires directamente al sol.

8. Descansa los ojos

Cualquier pantalla, ya sea la de tu ordenador, smartphone, tableta o televisión, emite una luz azul que puede cansar mucho a tus ojos. Por eso, para descansar la vista, haz pausas cada 20 minutos.

9. No fumes

Los cigarrillos son muy peligrosos para tu salud en general, y pueden causar graves daños a tu visión, o incluso dejarte ciego.

10. Hable con los que le rodean

¿Tienen los miembros de tu familia algún problema o enfermedad de visión en particular? Si no estás seguro, pregúntales, ya que las enfermedades se transmiten de generación en generación, así que querrás saberlo.